EN REPETIDAS OCASIONES he visto la mención de la palabra soccer en el blog de Daniel Salinas y ahora me gustaría aportar mis 2 pesos al respecto. Verdad es que yo sólo veo ese deporte en el mundial, donde se mueven las grandes figuras y tradiciones futboleras. Fuera de ahí, mi ignorancia asciende con facilidad. No sé nada de soccer ni la liguilla, ni la de invierno, verano, y que la camisa de los Pumas y ve tú a saber. Soy, en efecto, un abstemio de ese deporte, por cultura fronteriza (influencia de deportes de USA), y por estética, aguante: el tedio de estar dos tres horas viendo un marcador de 1-0. En esos aspectos, el soccer se asemeja al béisbol (marcador bajo), el cual SI es un deporte de mi predilección, y quien quiera hablar de los Padres, historia, jugadores, podéis hacerlo. Sin embargo --y aquí es donde me veré petulante--, en el fútbol americano poca gente puede contrarrestar mis sabidurías de equipos, jugadores, entrenadores, estrategias, alineaciones, tanto en equipos de fútbol profesional, como colegial. He ahí, en ese deporte donde puedo pasar los domingos pegado a la TV, de hecho, lo hago (lunes para Monday Night Football). Otro incentivo es que a veces apostaba dinero en Caliente y luego veía el partido. Esa es otra historia.