3/02/2005

EL COLUMNISTA


Cómo nace un proyecto. Nace bajo la necesidad de implementar ciertas ideas, expresar un instinto. Un tiempo, cuando meditaba acerca de las vías que podía tomar en cuestiones literarias, llegué a la idea de hacer una especie de publicación, panfleto, semanario, llámese lo que sea, la idea era sacar un impreso donde se pudieran proyectar cuestiones literarias. Investigué formas de comercialización, me hice de publicaciones y vi sus métodos para hacer rentable el proyecto. Sin llegar a mucho --en realidad no tenía los fondos--, dejé descansar la idea, el fólder donde guardaba toda la información recopilada y me entregué a otros menesteres.

La idea quedó pues, en el olvido. Pero hay ideas que regresan. Con la presencia de las páginas Web, volví a sentir la necesidad de armar un proyecto. Rumié la idea, la contingencia de reunir materiales y cómo plantearlo en un Web. Eso me llevó a Blogger, y su facilidad de publicación.


Publicado en EL COLUMNISTA


EL LOBO


Atrás de mi casa, que es la suya, hay un perro vecino que de pronto lanza ciertos estrépitos lastimeros. Lobo que sufre, animal herido. La pequeña ya tiene cierta fijación. Nomás lo oye, dice, El lobo. En un tiempo fue eficaz decirle que sí era un lobo, pero únicamente para mantenerle en raya la conducta, sus repentinos accesos de carácter. Cuando iniciaba uno de sus berrinches enérgicos, le decía que afuera estaba el lobo. El lobo, lo oyes. Eventualmente el perro confirmaba mis teorías: iniciaba sus aullidos, y la pequeña se asustaba un poco. Sé que no es un método inteligente para educar a los infantes: se puede crear una fijación negativa. Así pues, ahora le digo que es un perro muy quejumbroso, no un lobo: los lobos no existen en estas partes de la ciudad. No sé si le funcionó mi nueva teoría, pero a mí de pronto me entran sustos. Puedo estar tranquilamente en la computadora, trabajando, concentrado en mis cosas, cuando el silencio se rompe por uno de esos aullidos inquietantes. Y no tanto porque sea lobo, si no porque quiero imaginarme que ese animal ha de tener una existencia muy sufrida y trata de avisarle a alguien, a quien quiera escuchar.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario