No tengo cosas interesantes qué decir. Leo otros blogs, de autores más jóvenes que yo, y me doy cuenta que manejo una frivolidad (que hasta a mí me avergüenza). Unos hablan de cosas serias (ya saben quienes son, el grupito de amiguitos de TJ), y lo hacen con elocuencia. Yo manejo todo, menos lo serio. Cuando manejo lo serio, me meto en problemas. Empiezo a sonar muy paternalista. Muy wey que-quiere-hacerse-el-interesante. Cuando manejo lo tonto, lo bobo, lo simple, me muevo con rapidez, fluidez. Ni modo. Soy bobo.