Escribir, no es un acto de improvisación que uno comete una vez a la semana, mes, etc. Dos personas me han hecho llegar sus explicaciones de que no han tenido tiempo para escribir, y es ahí donde veo una reflexión para viernes. Escribir no es un acto esporádico. Escribir es un músculo mental. Si la mente trabaja diario en pos de una literatura, esta se hace cada vez más veloz y intacta, al punto de que escribir se hace natural, como hablar. No podéis hablar un día a la semana. Debéis hacerlo diario. Diario se cocinan artefactos de mente, y la mente trabaja a deshoras, cuando duermes, conduces el carro, para continuar operando en ese nivel de ficción que unos convierten en literatura.